Los archivos de Twitter. Cómo la red social censura hasta en las elecciones de EEUU-2020.

Pocos días antes de la celebración de las elecciones presidenciales en EEUU de 2020, la prensa citaba a supuestos oficiales de la CIA que pedían anonimato al argumentar que dentro de poco la población quedaría expuesta a una campaña de desinformación rusa. Se referían al contenido hallado en una laptop abandonada por Hunter Biden, hijo del actual presidente.
Según se cuenta, el hombre la llevó a un taller para ser reparada y nunca la recogió. En su disco duro se encontraron videos comprometedores suyos en los que parece verse bajo los efectos de estupefacientes.
Al comprender que culpar a Rusia no funcionaba, la Comunidad de Inteligencia comenzó a difundir el sentir que se trataba de contenido obtenido ilegalmente. Sin embargo, recientemente los medios de comunicación han admitido que, en efecto, la laptop era propiedad de Hunter y el contenido es genuino.
En el día de hoy, Elon Musk, quien dirige Twitter, anunció que mostraría al mundo de qué manera esta compañía censuró la historia de la laptop para evitar que influyera en contra de la campaña electoral de Joe Biden. El magnate proveyó al periodista Matt Taibbi con miles de documentos que utilizó para narrar la historia en la red social, la cual a continuación compartiremos con nuestros lectores.
Los archivos de Twitter.
Lo que estás a punto de leer es el comienzo de una serie basada en miles de documentos internos obtenidos por la fuente (periodista Matt Taibbi) en Twitter. Los archivos de Twitter narran una historia increíble desde dentro de una de las más grandes e influyentes plataformas de redes sociales del mundo. Es una historia frankensteiniana de un mecanismo creado por el hombre que se escapa del control de sus creadores.
Twitter, al principio, fue una herramienta brillante para mantener la comunicación masiva e instantánea, haciendo realidad por primera vez la conversación global en tiempo real. En sus inicios, cumplió con el principio de dar a la gente «el poder de crear y compartir ideas e información instantáneamente sin barreras.» Sin embargo, con el paso del tiempo, la compañía se vio forzada a introducir esas barreras. Algunas de las primeras que se usaron para controlar el discurso fueron diseñadas para combatir los Me Gusta a spam y fraudes financieros.
Poco a poco, con el tiempo, ejecutivos y empleados de Twitter comenzaron a hallarle más y más usos a estas herramientas. Entes ajenos a la compañía empezaron a solicitarle manipular el discurso: primero un poco, luego con más frecuencia y al final constantemente.


Se lee: Agarré el primero dentro del SI… referí a Seguridad la segunda cuenta (la cual pertenecía al actor James Woods)… Un reporte adicional proveniente del DNC (Partido Demócrata por sus siglas en Inglés.)

El resultado de las decisiones de moderación de contenido es abismalmente dispar, como podrás ver en los documentos a continuación. Estos también recogen el criterio de ejecutivos antiguos y actuales de la compañía.
Muy bien, el proceso en realidad era más complicado pero, al carajo. Entremos al meollo del asunto.
Cómo y por qué Twitter bloqueó la historia de la laptop de Hunter Biden.
El 14 de octubre de 2020 el periodico New York Post publicó un artículo titulado «Los correos secretos de Biden», exponiendo el contenido de la laptop abandonada por Hunter Biden (hijo del actual presidente de EEUU y anteriormente vicepresidente de Barak Obama)
Twitter tomó medidas extraordinarias para censurar la historia, removiendo enlaces (links) y colocando advertencias de que podría tratarse de contenido «inseguro». Llegaron incluso a bloquear la posibilidad de compartir el artículo vía mensaje privado, habilidad reservada para casos tan extremos como pornografia infantil, por ejemplo.
A Kaleigh McEnany, vocera de la Casa Blanca, se le bloqueó su cuenta por comentar acerca de la historia, lo cual contivó una furiosa misiva del miembro de la campaña electoral de Trump, Mike Hahn.

A la sazón, Caroline Strom, ejecutiva de relaciones públicas de Twitter, envió un mensaje de «qué carajos pasa» de modo cordial. Varios empleados notaron tensión entre el equipo de Comunicaciones y el de Pólizas, este último con menos control sobre moderación de contenido, y entre el de Seguridad y el de Confianza.

La nota de Strom fue respondida explicando que la historia de la laptop había sido removida por violar la política de Twitter acerca de Materiales Hackeados.

A pesar de que muchas fuentes recordaron haber sido alertados por oficiales federales en aquel verano acerca de posibles hackeos, no existe ninguna evidencia —que haya visto yo— de la intervención de ningún gobierno extranjero en la historia de la laptop. De hecho, tal vez ese haya sido el problema.
La decisión (de censurar la historia) fue tomada en los niveles más altos de la compañía por Vijaya Gadde, antigua líder del departamento legal, póliza y confianza, aunque sin el conocimiento de Jack Dorsey, director ejecutivo de Twitter.
«Lo hicieron por cuenta propia», comenta un ex-empleado. «El hackeo fue la excusa, pero en pocas horas casi todos se dieron cuenta que el argumento no se podía sostener. Sin embargo, nadie tuvo las agallas de revertir la decisión.»
La confusión puede verse a través del siguiente intercambio, el cual culmina incluyendo a Gadde y al antiguo jefe de Confianza y Seguridad Yoel Roth. Trenton Kennedy, empleado de Comunicaciones, escribe: «Estoy pasando trabajo para entender las bases mediante las cuales declaramos este contenido como inseguro».

En este punto, «todo el mundo era consciente de que la habían cagado», dijo un ex-empleado, pero la respuesta fue seguir adelante con la decisión tomada.

Vijaya Gadde
¿Qué alerta se ha decidido utilizar?
Yoel Roth
Cuando das clic en el vínculo, verás una alerta genérica de «inseguridad» (usados en spam, virus y violaciones de las reglas de Twitter) – no es ideal, pero es lo único que tenemos.
Ian Plunkett
Lo que sea que hagamos en Comunicaciones (se convertirá en un reclamo de prejuicio para Jack inmediatamente antes de su audiencia), dejemos claro que nos estamos encargando pero cautelosamente interpretando esto a través del lente de nuestra póliza de materiales hackeados y permitiendo que el link se pueda hacer clic aunque con la alerta y reducción significativa de su divulgación.
En este punto, «todo el mundo era consciente de que la habían cagado», dijo un ex-empleado, pero la respuesta fue seguir adelante con la decisión tomada. Entonces, el antiguo vicepresidente de Comunicaciones Globales, Brandon Borrman, pregunta: «Podemos realmente decir que esto es parte de la póliza.»

…A lo que el antiguo diputado general Jim Baker justifica porque «ser cauteloso da garantía».

Un problema fundamental de las compañías tecnológicas y la moderación de contenido es que muchas personas a cargo del lenguaje conocen o les importa poco el lenguaje, y se les debe instruir en los conceptos básicos del mismo.
En un intercambio gracioso sucedido el primer día, el congresista demócrata Ro Khanna se dirigió a Gadde para pedirle gentilmente que le hablara por teléfono y conversar acerca de la «reacción» (a la decisión tomada por ella). Khanna fue el único demócrata que pude encontrar en los archivos que expresó preocupación.

Gadde contestó rapidamente refiriéndose a la esencia de las pólizas de Twitter, sin darse cuenta de que Khanna estaba más preocupado por la Declaración de Derechos de los Estados unidos (Bill of Rights):

Me daría gusto hablar por teléfono con usted si sirve de ayuda. Mi equipo de DC (Jessica y Lauren) recibirán copia de este mensaje y también se encuentran disponibles.
Gracias,
Vijaya
Khanna, entonces, intenta redirigir la conversación a la Primera Enmienda (Libertad de Expresión), cuya mención a duras penas aparece en los documentos:

Además ahora parece dirigirse a recortar la sección 230 – mucho de la cual ha sido malinterpretada.
Pienso que Twitter debería recortar lo que recomiende o poner en tendencia noticias y su póliza contra los grupos QAnon. Es difícil balancearlo.
Pero, en medio de una campaña presidencial, restringir la distribución de artículos de prensa (incluso si el NY Post es de ultraderecha) parece invitar a mayores reacciones en contra que el bien que pudiera hacer.
Por favor mantén esta comunicación solo entre nosotros y Jack y no necesitas enviarle copia a tu equipo.
Solo quería ofrecer mi modesta ayuda.
Un día después, Lauren Culbertson, jefa de Pólizas Públicas, recibe una carta/reporte de Carl Szabo de la firma de estudios NetChoice, la cual ya había consultado a 12 congresistas (9 republicanos y 3 demócratas) miembros del Comité Judicial de Representantes.

NetChoice le informa a Twitter que le aguarda un «baño de sangre» en la próxima audiencia en la Colina (Capitolio), cuyos miembros creen que se trata solo de «la punta del iceberg», quejandose de que «las tecnológicas han crecido tanto que ni siquiera pueden regularse a sí mismas, así que quizás el gobierno necesite intervenir.»

Szabo reporta a Twitter que algunas figursa en la Colina caracterizan la historia de la laptop como «momento de acceso exclusivo de las tecnológicas tipo Hollywood.»

La carta de Szabo contiene fragmentos escalofriantes al referirse a la actitud de legisladores demócratas. Ellos quieren «más moderación (de contenido) y, en cuanto a la Declaración de Derechos, pues no es absoluta.»

Los demócratas estaban de acuerdo: Las redes sociales necesitan moderarse más porque están corrompiendo la democracia y haciendo que las «verdades» sean relativas. Al preguntarles cómo el gobierno debería insistirles en ello en consistencia con la Primera Enmienda, la obviaron: «la Primera Enmienda no es absoluta.»
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